¿Es bueno el flúor para los dientes?

Sí. Previene las caries. Las bacterias en la boca se alimentan de azúcar y segregan ácido láctico que rebaja el pH de la boca lo suficiente como para disolver el esmalte del diente (hidroxilapatita). Con fluoruros se refuerza el esmalte (los iones fluoruro reemplzan alguno grupos hidroxilos de la hidroxilapatita, conviritiéndolos en fluoroapatita más resistentes) y ademásreminelarizan el diente defendiéndolos de la formación de caries. Vale. Bien. Hoy, los investigadores están de acuerdo en los beneficios. Pero también en los perjuicios que puede ocasionar una elevada dosis de flúor. La fluorosis en niños a los que les están saliendo los dientes les genera una deformación en los dientes. Además, también afecta a los huesos puesto que los fluoruros aumentan el volumen óseo y pueden provocar fracturas, incluso cáncer de huesos: osteosarcomas. La cantidad recomendada hoy día está entre 0,05 y 0,07 miligramos diarios por kilogramo de masa corporal. Nos encontramos por tanto con un ejemplo más de cómo los avances y éxitos científicos no están exentos de cierta controversia cuando se profundiza en ellos. Porque ¿seguiremos fluorando el agua de la misma forma ahora?