Hoy es Nochebuena y mañana Navidad...


Hoy los cristianos celebran el nacimiento de Jesús, en una humilde familia. Hoy celebran el nacimiento de la familia más importante de la historia, una familia basada en el amor (según crónicas).
Hoy por la mañana, mientras menda terminaba de hacer las compras navideñas, escuché más de dos veces un "felices fiestas" respondido por un "sí, sí, y ojalá fuera 7 de enero". Cada año ocurre lo mismo, al llegar estas fechas nos sentimos presionados por la publicidad, presionados a tener la gran cena, a reunirnos con los que no hablamos, añoramos a los que nos dejaron o los que no llegaron, sentimos envidias, estamso con los sentimientos a flor de piel, nos obligan a tener que ser felices cuando el cuerpo te pide que todo siga como siempre, que no nos saquen de la rutina.....
De todas formas, me quedo con esa obligación publicitaria de "tenemos que ser felices" porque no creo que esté mal que nos lo recuerden de vez en cuando. Dejarme quitarle el trasfondo consumista que haya detrás y dejarme que me quede con el aprovechar estos días para juntarme con los más cercanos y dedicarles algo de cariño. Que la cena no sea más que una excusa, como un café para una charla.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues tienes razón. Pese a que parece que se nos obliga a ser buenos por estas fechas si con eso conseguimos que al menos unos días al año la gente tenga un poco más de corazón y se junte con la familia pues merece la pena. Yo también lo alejo del plano consumista y me quedo con las buenas obras y los buenos momentos. Muchos de ellos me los dais vosotros!